Desde hace unos años se ha puesto en tendencia la palabra antienvejecimiento en muchos de los productos que encontramos para el cuidado de pieles maduras; sin embargo, el cuidado que requiere la piel a partir de los 40 años va más allá de luchar contra el tiempo. El objetivo principal es lucir una piel saludable, descansada y fresca.
En el mundo de la belleza podemos encontrar un sinfín de productos que ofrecen soluciones de belleza contra la edad; sin embargo, la vida adulta viene con diversos cambios que debemos abrazar: nuestro cabello cambia en textura y proporción, nuestra tez tiene más expresión y revela los efectos de los genes y nuestro historial en daño solar, tabaquismo, mala alimentación e incluso la falta de una rutina skin care temprana.
A partir de los 40 años la piel comienza a adelgazarse y puede sentirse seca e irritada, razón suficiente para armar un plan de cuidado ideal y efectivo que, además de que contenga productos funcionales acorde a nuestras necesidades, vayan de la mano con hábitos saludables que beneficien a nuestra piel. ¿Qué tomar en cuenta para accionar este plan? Beatriz Magrassi, dermocosmiatra de Suzanne Olivier, recomienda lo siguiente:
Prevenir una tez con manchas. El paño facial es común en una piel madura, esto se debe a a la melanina, que protege a la piel a través de melanocitos que se activan con fuentes de calores; es decir: rayos UV, el calor de la estufa, la refracción de luz, el calor que se siente al estar horas en el tráfico dentro del coche, entre otras beneficiando la aparición de máculas, pecas y melasma, todas forman parte de las hipercromías. La concha nácar es un elemento natural que es conocido por sus bondades despigmentantes. Existen líneas que han diseñado productos que la contienen en conjunto con el ácido láctico y el pepino que disminuyen paulatinamente estas manchas.
Retener la firmeza juvenil de la piel por más tiempo. La vitamina E forma parte de los antioxidantes, ya que atrapa los radicales libres que causan daño en las células de la piel. El aplicarla de forma tópica complementa el proceso de renovación celular de la piel, mejorando el tono y la textura.
Reducir las líneas finas y las arrugas. Seguramente has escuchado sobre los beneficios de la baba de caracol. Esta sirve para estimular la formación del colágeno, elastina, dos componentes que reparan los signos del envejecimiento, ayudan a prevenir y disminuir las líneas de expresión, arrugas finas.
Mantener la tez con un aspecto más brillante y joven. Ya sea en suero o en crema facial, la jalea real se ha convertido en una necesidad. Esta disminuye los signos del cansancio y fatiga que se reflejan en la piel, ya que humecta, nutre y protege.
Reducir el riesgo de cáncer de piel. La protección solar es la base de todo plan para el cuidado de la piel. Los rayos del sol hacen que nuestra piel envejezca mucho más rápido. Tenemos tanta evidencia de que el sol envejece prematuramente nuestra piel debido al foto envejecimiento, que es una obligación protegerla.
En este mes, aprovecha para consentir a todas aquellas mujeres y madres que aman el cuidado de la piel sin importar la edad, para lucir una piel radiante y sana.