En México, el 56,1% de los adultos tiene niveles altos de colesterol de las lipoproteínas de baja densidad (LDL-C) o colesterol malo, considerado el principal factor de riesgo de enfermedades cardiovasculares y el causante de la enfermedad cardiovascular aterosclerótica (ECVAS), que es una acumulación de grasas, colesterol y otras sustancias dentro de las arterias y sus paredes que puede provocar el estrechamiento de las mismas y obstruir el flujo sanguíneo.
La American Heart Association®, la organización líder en el mundo para la promoción de la salud y la longevidad, ha lanzado un nuevo programa científico de implementación en México que se centra en mejorar la atención de los pacientes con ECVAS, también conocida como aterosclerosis, y que ha sido posible gracias al patrocinio de Novartis.
La iniciativa científica de implementación de la American Heart Association identifica, formula e integra las mejores prácticas clínicas y flujos de trabajo en las rutinas de los profesionales sanitarios. La estandarización del diagnóstico y tratamiento de las enfermedades cardiovasculares es un principio fundamental de las iniciativas de mejora de la calidad que la American Heart Association implementa en todo el mundo.
Actualmente, sólo dos tercios de la población con ECVAS en México recibe algún tipo de tratamiento. De estas personas, menos de la mitad reciben tratamiento y, entre aquellos que lo hacen, el 45% no están controlados y no cumplen con el tratamiento.
“Reducir los niveles de LDL-C de forma uniforme y sostenible es clave para prevenir la aterosclerosis y, por ende, prevenir las complicaciones derivadas de esta enfermedad, como el infarto de miocardio, la insuficiencia cardíaca y el accidente cerebrovascular”, señala el Doctor Jorge Saucedo, MBVA, FAHA, experto voluntario de la American Heart Association, profesor y jefe de departamento del Centro Cardiovascular de Froedtert Hospital de la Facultad de medicina de Wisconsin.
“La American Heart Association y sociedades profesionales como la Sociedad Mexicana de Cardiología y la ANCAM (Asociación Nacional de Cardiólogos de México) están colaborando para llamar a las instituciones de salud públicas y privadas a combatir esta enfermedad de forma integral”.
Como parte de la iniciativa, se capacitará sobre la aplicación adecuada de las estrategias de mejora de la calidad, se proporcionarán consultas hospitalarias y revisión de los datos, y se generarán evidencias que ayuden a poner de manifiesto tanto los logros como los retos actuales y futuros de la atención cardiovascular. Aprovechando sus más de 20 años de experiencia en la mejora de la calidad, la American Heart Association utilizará su registro estadounidense Get With The Guidelines para recopilar los datos, lo que permitirá ampliar las oportunidades de evaluación comparativa e investigación.
“Al apoyar esta iniciativa, buscamos detectar esta enfermedad, administrar el tratamiento adecuado para ella y frenar su progreso”, comentó la Doctora Viviam Ubiarco, directora médica de Novartis México. “El impacto de estas acciones se verá reflejado en la disminución de ataques cardíacos, hospitalizaciones y muertes, que en muchos casos representan un alto costo para el sistema de salud y afectan la calidad de vida del paciente”.
La Doctora Giselle Román, encargada del área terapéutica de Enfermedades Cardiovasculares de Novartis, agregó: “Al educar a la población y generar un sentido de urgencia en las instituciones que prestan servicios de salud, podemos mejorar el tratamiento de las enfermedades cardiovasculares, una pandemia invisible en México”.