La obesidad en México se ha transformado en un problema de salud pública que afecta no sólo a la población adulta sino también a niños y adolescentes. Los casos de obesidad en adolescentes han crecido de manera notable en los últimos años.
De acuerdo con la Encuesta Nacional de Salud y Nutrición (ENSANUT) 2021, en nuestro país la prevalencia de población adolescente de 12 a 19 años con sobrepeso y obesidad es de 42.9%, cifra más elevada que en ENSANUT 2018, la cual fue de 38.4%, lo que coloca a México entre los primeros lugares en obesidad infantil y adolescente a nivel mundial.
La adolescencia es la etapa del desarrollo humano que presenta una serie de desafíos en la indispensable adaptación que el joven debe hacer frente a sí mismo, a su cuerpo y al entorno, reto mayor en los adolescentes que viven con obesidad, quienes presentan una sintomatología psíquica de ansiedad y depresión.
En el Novo Nordisk Leaders Summit (NNLS) 2022 Edición Obesidad, especialistas discutieron que la aplicación de tratamientos nutricionales y cambio en el estilo de vida no son suficientes para el control del sobrepeso/obesidad, debido a que la obesidad es una enfermedad multifactorial con componentes emocionales de importancia que la hacen aún más compleja.
En su ponencia, el Dr. Michael Vallis, psicólogo de la Salud y profesor asociado de Medicina Familiar en la Universidad de Dalhousie, Canadá, mencionó que la obesidad genera sentimientos de baja autoestima en el adolescente. “Por un lado, las personas se enfocan en el número de kilos en la báscula y la forma de su cuerpo como factores determinantes de su valor personal y por otro lado esperan hasta once años para decidir hablar del problema con su médico”.
El Dr. Vallis señaló que la obesidad es una enfermedad progresiva y que cuando hay re- ganancia de peso, la terapia psicológica es necesaria. “Lo importante es que en el abordaje de la obesidad, se reúnan los aspectos médico y psicológico, junto con el aspecto nutricional y la actividad física”.
“El médico debe apoyar al paciente en su progreso. El exceso de peso no debe ser tomado como un fracaso, ya que tiene un aspecto biológico importante, en él intervienen la carga genética y la actividad cerebral. La comprensión de esta realidad por parte del paciente puede cambiar su perspectiva de fracaso a una de éxito. Las victorias no deben ser asociadas con la báscula. Cuando el paciente es informado de que la obesidad es una enfermedad crónica, siente alivio porque deja de sentirse culpable y eso le da la esperanza para mejorar la salud”, subrayó el especialista.
¿Cuál es el mejor peso para el adolescente con obesidad?
El Dr. Michael Vallis indicó que, en cuanto a reducción de peso, los números no deben ser una meta. “El médico debe enfocarse en que cada persona pueda mantener un patrón de conducta y buscar el peso saludable. No es necesario hacer abordajes dramáticos porque no funcionan; la pérdida de peso tiene que ser sostenible y de acuerdo con las características individuales de cada paciente. Si el paciente tiene sentimientos de satisfacción, su conducta sostenida será de éxito”.
“Los médicos debemos comprender que vivir con obesidad causa problemas psicológicos que necesitan ser atendidos. No debemos regañar al paciente, sino apoyarlo, ya que se enfrenta al estigma y la mala información. Por ejemplo, la TV pone a las personas con obesidad como un mal ejemplo. El peso ideal para la TV no es el peso saludable para el paciente”, aseveró el Dr. Vallis.
El también profesor asociado de Medicina Familiar en la Universidad de Dalhousie, Canadá, dijo que a pesar de que la obesidad es una condición médica, la imagen corporal es muy importante para el paciente, e hizo hincapié en que el médico debe alimentar una autoestima no centrada en la imagen corporal. “La obesidad necesita un abordaje más compasivo y empático, a través del cual logremos que los pacientes se acepten y sean la mejor versión de sí mismos”, concluyó.
Llega a México nueva y eficaz alternativa terapéutica para la obesidad en adolescentes
Durante el NNLS 2022 Edición Obesidad, Novo Nordisk presentó a la comunidad médica una nueva y eficaz alternativa terapéutica para el tratamiento de la obesidad en adolescentes: Liraglutida 3mg, análogo de la hormona GLP-1 que causa una sensación de saciedad actuando a nivel cerebral. Además de bajar el peso corporal, evita la recuperación del peso perdido.
La Dra. Margarita Barrientos, especialista en endocrinología pediátrica e investigadora clínica, informó que “en estudios clínicos liraglutida demostró, junto con cambios en el estilo de vida, una reducción del índice de masa corporal de 5% en el 43% de los pacientes y 10% de reducción del índice de masa corporal en el 26.1% de los pacientes. La reducción del 5 al 10% del peso corporal trae grandes beneficios a la salud metabólica y cardiovascular”. Recuerda siempre acudir con tu médico.