Los besos son una parte importante en toda relación; sin embargo, no siempre son placenteros, especialmente cuando un integrante de la pareja presenta fuegos labiales. Esta afección es producida por el virus de herpes simple tipo 1 (VHS-1), cuya principal fuente de transmisión son los besos.
De acuerdo con cifras de la Organización Mundial de la Salud (OMS), a nivel mundial el 67% de la población menor de 50 años está infectada con el virus del herpes simple tipo 1 (VHS-1).
El herpes simple es una infección viral de transmisión por contacto, que tiende a reaparecer después de un periodo de curación. Una vez contraído el virus se tiene para siempre, aunque no se presente ningún síntoma y puede activarse en cualquier momento.
“Es una infección que puede generar lesiones en áreas cercanas a la boca, especialmente en los labios y en zona de genitales, pueden ser muy molestas, y evolucionan con curación y recaídas en el transcurso de la vida. Existen antivirales que alivian los síntomas y ayudan a reducir la duración de los brotes, pudiendo presentarse hasta 4 o 5 en el año. Las lesiones suelen aparecer en el mismo lugar cada vez que se reactiva la enfermedad”, advirtió la doctora Susana Canalizo Almeida, presidenta de la Fundación Mexicana para la Dermatología (FMD).
En México, hasta el 40% de la población padece las lesiones producidas por el VHS-1, lo cual representa hasta el sexto lugar de la consulta dermatológica por sus manifestaciones en la piel, refirió la doctora Canalizo Almeida.
Se transmite principalmente por contacto con el virus en las úlceras, la saliva o la zona bucolabial. Aunque menos frecuente, también puede transmitirse a la zona genital por contacto bucogenital, lo que provoca el herpes genital (infección por VHS-2). Por lo tanto, los besos representan un medio de contagio, ya sea boca a boca o por realizar sexo oral, si se tienen lesiones activas en el momento de la práctica.
“El mayor riesgo de contagio suele ser vía directa, de una persona con una lesión activa. Sin embargo, puede transmitirse desde superficies bucales o cutáneas en apariencia normales”.
El VHS-1 se manifiesta como vesículas o úlceras en la boca o a su alrededor, las cuales son muy dolorosas, antes de su aparición los pacientes suelen notar una sensación de hormigueo, picor o quemazón en esa zona.
El VHS-2 se transmite principalmente durante las relaciones sexuales, por contacto con las superficies genitales o anales, la piel, las vesículas o los líquidos de la persona infectada.
El VHS-2 puede transmitirse, aunque la piel tenga apariencia normal y, de hecho, la transmisión ocurre con frecuencia en ausencia de síntomas (uno de los motivos por los que se debe usar un preservativo durante las relaciones sexuales).
“Otras áreas del cuerpo que también son propensas a infectarse son aquellas en donde la piel está cortada, quemada o irritada”, agregó.
Ante esta situación, la Fundación Mexicana para la Dermatología, comparte algunas medidas para prevenir el contagio del herpes simple:
- Evitar los besos y el contacto directo con la piel de las personas que tengan un herpes labial activo y no compartir alimentos o bebidas.
- Lavarse las manos cuidadosamente, si se tienen lesiones activas, antes de tocar a otra persona.
- Cuidado con tocar otras partes del cuerpo. Los ojos y los genitales son particularmente sensibles a la diseminación del virus.
- Evitar las situaciones que pueden desencadenar un episodio de herpes labial, como el frío, el sol y el estrés.
- El empleo de protectores solares sobre los labios y la cara antes de una exposición prolongada al sol, tanto en verano como en invierno.
- Si se padece el VHS-1 hay que evitar el contacto con niños o personas inmunodeprimidas (con enfermedades como cáncer, VIH o que hayan recibido algún trasplante), en los que la infección puede cobrar mayor gravedad.
- Las relaciones sexuales –orales o genitales– pueden transmitir la infección (VHS-2), de manera que hay que abstenerse mientras haya presencia del virus activo.
- Recuerda, que el VHS-2 que ocasiona el herpes genital, puede transmitirse a partir de la piel aparentemente sana, motivo por el cual siempre debes usar un preservativo, cuando tengas relaciones sexuales con una nueva pareja.
Finalmente, la doctora Susana Canalizo manifestó la importancia de evitar remedios caseros o tratamientos de dudosa procedencia porque pueden generar complicaciones y retrasar el proceso de curación de las lesiones. Llamó, a quienes tengan lesiones activas de herpes simple “a evitar el contagio a personas sanas” y las invitó a que acudan de forma periódica con el dermatólogo, ya que la salud se inicia con la prevención, concluyó.