Los sistemas de salud en Latinoamérica presentan falta de acceso y desigualdad en la salud de la mujer, representando un efecto negativo en el diagnóstico, tratamiento, monitoreo y atención que reciben las mujeres a lo largo de su vida. Existen enfermedades que al no ser atendidas de manera oportuna y prioritaria pueden desencadenar efectos perjudiciales en la salud de los pacientes.
Según la OMS, en el ámbito mundial, el cáncer cervical es el cuarto cáncer más frecuente en la mujer, con una incidencia estimada de 604,000 nuevos casos en el año 2020. De las 342,000 muertes estimadas por esta enfermedad en este periodo, más del 90% tuvieron lugar en los países de ingresos bajos y medianos. Lamentablemente, más del 90% de los casos de cáncer cervical son originados por la infección persistente del virus del papiloma humano (VPH) no detectado a tiempo.
En México, para 2020 el cáncer cervicouterino fue el segundo más diagnosticado y la segunda causa de muerte en mujeres, con un estimado de 9 mil 439 nuevos casos y 4 mil 335 muertes. Registra una tasa de incidencia de 12.6 y de mortalidad de 5.7 por 100 mil, aunque con respecto a 2012 se observa una disminución importante.
Por otra parte, en 2021, el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) detectó mil 155 casos nuevos y mil 59 defunciones con una tasa de incidencia de 2.26 por 100 mil y una tasa de mortalidad de 5.23 por 100 mil. El estado de Chiapas presenta la tasa de mortalidad más alta en el país (11.91).
Sin embargo, el cáncer de cuello uterino es prevenible si el virus que lo causa (VPH) es diagnosticado de forma temprana, por lo que es importante analizar las etapas de vacunación; el tamizaje molecular permitirá detectar cualquier pre cáncer y tratarlo, afirma el Dr. Carlos Pérez, Presidente de la Federación, Internacional de Patología Cervical y Colposcopía.
Frente a este contexto, el próximo 30 de marzo, la Federación Internacional de Patología Cervical y Colposcopía (IFCPC), realizará el Foro Latinoamericano por la prevención del Cáncer de Cuello Uterino (FLPCC), con el objetivo de compartir información y debatir sobre las situaciones actuales en la salud, específicamente el acceso y resultados de aplicar políticas que permitan aportar a la estrategia de la OMS para eliminar el cáncer de cuello uterino.
El FLPCC podrá seguirse en vivo a través de la web: https://flpcc2023.stringnetlab.com/
En este evento participarán Perú, México, Ecuador, Colombia, Argentina, Chile, República Dominicana, Panamá y Guatemala, países que expondrán sus programas, experiencias y casos, visibilizando los resultados y aprendizajes de contar con estrategias integrales que abarquen desde la vacunación, tamizaje y monitoreo. Este espacio, también brindará la oportunidad de mostrar nuevas formas de diagnóstico a las que mujeres de sectores rurales y/o alejadas de centros de salud puede tener acceso, como es el caso de pruebas moleculares de VPH, de autotoma, un tipo de prueba de alto valor médico recomendada por la OMS como herramienta en la ruta hacia la eliminación de esta patología.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha propuesto acelerar la eliminación del cáncer cervical para el 2030, a través de la estrategia 90-70-90 la cual está establecida de la siguiente manera:
- 90% de las niñas sean totalmente vacunadas contra el VPH antes de los 15 años.
- 70% de las mujeres sean examinadas mediante una prueba de alta precisión antes de los 35 años y de nuevo antes de los 45 años.
- 90% de las mujeres diagnosticadas con cáncer de cuello uterino reciben tratamiento (el 90% de las mujeres con lesiones precancerosas reciben tratamiento y el 90% de las mujeres con cáncer invasivo reciben la atención pertinente).
En sus directrices actualizadas, la OMS alienta a los países a utilizar las pruebas de diagnóstico molecular de alta sensibilidad para VPH, las cuales permiten realizar un estudio a través de ADN y así lograr detectar los tipos del virus de alto riesgo, que causan casi todos los casos de cáncer de cuello uterino.