En los últimos 20 años, la fecundidad en México ha cambiado y ahora no solo se habla de un tipo de familia, los hogares se constituyen de otras maneras, y sin importar quienes las integren la familia es fundamental.
Los factores que han modificado a los tipos de familias que existen en la actualidad se relacionan con la reducción de la fecundidad, aunada al aumento de la esperanza de vida de la población, que genera un acelerado proceso de envejecimiento.
La modificación en el rol de la mujer al incorporarse a la vida laboral, adquiriendo independencia económica, procurando su desarrollo y ampliando sus oportunidades, lo que ha retrasado su maternidad y ha ponderado la importancia de la reproducción asistida.
En conferencia de prensa en donde se abordaron temas como los retos de la reproducción asistida, el Dr. Álvaro Santibáñez, ginecólogo y obstetra, con maestría en Biología de la Reproducción, señaló que la innovación científica y la aplicación de la Inteligencia Artificial (IA) ha logrado avances significativos en las técnicas de reproducción asistida en México y en el mundo.
El ex coordinador de la Unidad de Reproducción Asistida del Instituto Nacional de Perinatología apuntó que en promedio, las mujeres inician tratamiento a los 39 años de edad, asimismo aseguró que la primera causa de infertilidad son las infecciones de transmisión sexual, la endometriosis, así como la obesidad, entre otros factores.
Comentó el especialista que es recomendable que las mujeres se realicen una prueba para determinar la hormona antimülleriana (AMH), marcador utilizado para evaluar la reserva ovárica de la mujer y, por tanto, valorar su estado de fertilidad a partir de los 20 años.
Los valores altos de AMH indican que la reserva ovárica es óptima. Sin embargo, a medida que aumenta la edad de la mujer, estos valores van disminuyendo hasta que se produce un agotamiento ovárico.
En la mayoría de los casos, las parejas que acuden ilusionadas a las clínicas de reproducción asistida se dejan llevar por los resultados que sobre sí mismas muestran, sin que señalen con precisión que el “éxito de la reproducción asistida depende en buena medida de la edad de la paciente y de la calidad de los óvulos; la edad con mejor resultado para lograr un parto después de transferir un embrión es a los 28 años”.
Andrea Berreta, de 34 años de edad y diseñadora de interiores, comentó que ella no sabía que todas las mujeres nacen con una reserva ovárica que disminuye con el paso del tiempo, condición que es importante para poder procrear.
La infertilidad y su impacto en la familia
En la actualidad las mujeres alcanzan con mayor facilidad estudios superiores o ingresan a la fuerza laboral, por lo que al priorizar su vida profesional postergan la maternidad y la formación de una familia.
Otro factor que debe señalarse es la infertilidad, que en el mundo afecta a cerca de 48 millones de parejas y 186 millones de personas. “Se trata de una enfermedad del sistema reproductivo masculino o femenino consistente en la imposibilidad de conseguir un embarazo después de 12 meses o más de relaciones sexuales habituales sin protección”.
En México, poco más del 17% de las mujeres mexicanas en edad reproductiva padece infertilidad, lo que se traduce en que al menos 2.5 millones de parejas en nuestro país luchan con este problema, de acuerdo con datos del INEGI y especialistas.
Sin importar si se habla de hombres y mujeres, la infertilidad se muestra como una carencia que incide en el desarrollo de las personas, al producir frustración, tristeza, depresión y pérdida del sentido de la vida.
Las personas que se enfrentan a los diagnósticos de infertilidad acuden en más de una ocasión a recibir tratamientos, algunos convencionales y otros no tanto, en su búsqueda por concebir y dar a luz un hijo o hija de modo biológico o anatómicamente natural.
¿Por qué acceden a ello? Porque la infertilidad sigue viéndose y entendiéndose como una condición vergonzosa tanto para hombres como para mujeres, por esa razón, quienes padecen esta condición prefieren negar su existencia y buscar opciones con las cuales acceder a la formación de una familia, la institución social en la que surgen las primeras relaciones sociales, emocionales y de integración.
Se estima que más de 3.5 millones han nacido en el mundo mediante técnicas de reproducción asistida. En México se calcula que 1.5 millones de parejas padecen problemas de infertilidad; sin embargo, solo un bajo porcentaje acude con un especialista para conseguir tratamiento.
Este problema de salud se ha convertido en un problema sanitario, pues no solo se trata de la infertilidad sino de un problema de salud mental para las parejas que lo experimentan, debido al largo y complejo proceso que recorren para intentar quedar embarazadas.
¿Qué pasa con los niños que nacen por técnicas de reproducción asistida?
En 1978 nació el primer bebé resultado de una fecundación in vitro, desde entonces y hasta 2019, se estimaba la concepción de 5.4 millones de bebés bajo técnicas de reproducción asistida.
Las parejas que acuden a técnicas de reproducción asistida para formar una familia en ocasiones se preguntan si los niños serán diferentes física o conductualmente a los niños que nacen de forma “natural”. Respecto a esta situación se han realizado múltiples estudios en los niños en edad escolar y en la adolescencia y los hallazgos señalan que los niños en edad escolar tienen menos problemas del comportamiento o emocionales, y, al mismo tiempo, presentan mejores habilidades cognitivas.
Esto se debe a que los padres tienen una mayor preocupación por su crianza, además del compromiso emocional y del empeño que ponen sus padres por protegerlos y educarlos de la mejor forma posible.
Conocer cómo se relacionan y establecen las relaciones de padres e hijos con niños concebidos bajo técnicas de reproducción asistida, plantea cuestiones referentes a cómo serán estos niños en el futuro, cuáles serán sus dudas, sus diferencias con los demás y cómo se concebirá a sí mismos.
Para Vincent Payet, CEO de Ferring México y del Norte de Latinoamérica, indicó que es importante informarle a los hijos cómo fueron concebidos, como en el caso de las parejas homoparentales.
Este es el caso de Plan M, una campaña de awareness de Ferring y una comunidad que desde su lanzamiento en 2020, se enfoca en América Latina, especialmente en México y Colombia, en aquellas personas y parejas que desean formar una familia en el corto, mediano o largo plazo.
Las personas que forman parte de la comunidad Plan M tienen acceso a información exclusiva sobre la planeación de la maternidad y la paternidad, mientras conocen en voz de expertos médicos, abogados psicólogos y otras personas que comparten su experiencia.
En la conferencia también participaron Jerry Sánchez, Maya Payet-Huet y Alin Sobrino Cosío.
Fotos: Cortesía y especiales