En este inicio de año, uno de los propósitos que más se plantean es bajar de peso, lo que brinda una oportunidad idónea para revisar los diferentes tipos de dietas que existen y romper con algunos mitos alrededor de las más populares, como la keto y la detox, por ejemplo. ¿Cuál es la más conveniente para reducir el sobrepeso?
Antes de responder esta pregunta, la Dra. Coralys Abreu, especialista en endocrinología, con alta especialidad en enfermedades de la tiroides, señaló que en México la alimentación es muy alta en carbohidratos, alimentos procesados y azúcares, lo que unido al sedentarismo y la falta de actividad física, nos ha llevado al incremento del sobrepeso y la obesidad, condiciones que afectan al 75.2% de la población adulta de 20 años o más y causan severos daños a la salud.
Primer mito: una dieta sana no contiene carbohidratos
La especialista explicó que una dieta sana es diferente para cada persona y que debe ser balanceada, con la aportación de todos los nutrientes que el cuerpo necesita para mantener sus funciones; debe ser baja en alimentos procesados y sin grasas trans. “El primer mito alrededor de la dieta sana es que no debe incluir carbohidratos, pero esto no es correcto, ya que la dieta diaria debe tener una cantidad adecuada de proteínas y carbohidratos. Lo aconsejable es usar carbohidratos complejos, que contengan fibra”.
Segundo mito: hay dietas mejores que otras
“No hay una dieta mejor que otra, ya que eso depende de las necesidades de cada persona. La mayoría de los estudios indican que la dieta mediterránea es la más completa y flexible, ya que incluye fibra, vegetales y proteínas de alto valor nutricional y además aporta beneficios cardiovasculares”, informó la Dra. Abreu.
Respecto a la dieta keto, que elimina o reduce al máximo los hidratos de carbono y promueve el consumo de grasas y proteínas, la Dra. Abreu dijo que tiene beneficios demostrados. Aconsejó que si esta dieta se va a hacer durante una semana o un mes, debe ser supervisada por un especialista en nutrición, que evalúe si es la indicada para las condiciones de salud que tenga la persona.
Otra dieta es la detox, que consiste en realizar una dieta absoluta o parcial con base en licuados de frutas y verduras. “Una restricción excesiva de calorías durante una semana o quince días reduce bruscamente de peso, pero también genera un rebote o reganancia rápida de peso. Si hacemos esto con frecuencia crearemos una resistencia cada vez mayor. Por ello, esta dieta funciona de maravilla la primera vez, pero cada vez que lo volvamos a intentar ya no funcionará tan bien”.
La Dra. Abreu hizo hincapié en que las dietas muy restrictivas no son adecuadas y que se debe hacer conciencia para mejorar hábitos de manera sostenible, con dietas que respondan a los requerimientos de cada persona. “Para bajar de peso debemos consumir menos calorías de manera sostenida y con la aportación de los nutrientes necesarios”.
Tercer mito: El ayuno permitirá comer de todo, sin límite
Una de las prácticas más recurrentes en las personas que desean prevenir el sobrepeso es hacer ayunos, no desayunar o comer, para que después se pueda comer todo lo que se quiera en algún evento especial. “Este es el peor error que se puede cometer. Omitir comidas o no comer en todo el día va a causar que posteriormente la persona tenga tanta hambre que devore todo y el exceso calórico que va a consumir puede contribuir a que suba de peso”, subrayó la especialista.
La Dra. Abreu explicó que cuando se ayuna el metabolismo basal disminuye. “Si yo no doy a mi cuerpo la energía que debe consumir para realizar sus funciones basales, va a reducir su gasto energético y almacenará todo lo que pueda. En este sentido, los ayunos no son recomendables. Lo que sí se puede hacer es consumir menos calorías en el día, desayunar más ligero, comer más verduras, pero no saltarse las comidas o ayunar para después comer en exceso”.
“En este inicio de año cargamos con las secuelas de las pasadas celebraciones decembrinas, en las que el exceso en el consumo de calorías pudo haber provocado un aumento de peso de entre 2 y 5 kilos. Subimos de peso no necesariamente por lo que comimos, sino debido a las proporciones que ingerimos. Las personas con diabetes o hipertensión pueden descompensarse en este inicio de año si consumieron en exceso los alimentos típicos de las festividades”, puntualizó Coralys Abreu.
Para mantener la salud y el peso durante todo el año, la especialista recomendó realizar actividad física; mantenerse hidratados; restringir el consumo de alimentos con alto contenido de calorías, grasas y sal; procurar consumir cantidades generosas de verduras frescas, y reducir el consumo de pan, postres y bebidas alcohólicas.
“Si las personas buscan una reducción de peso sostenida, es importante que acudan a clínicas especializadas en el tratamiento de la obesidad, donde contarán con la atención de un equipo multidisciplinario integrado por médicos, nutriólogos, médicos del deporte y psicólogos, que brindarán la atención integral que cada persona requiera, de acuerdo con su estilo de vida y condiciones de salud”, recomendó la especialista en endocrinología.