Esta celebración del Día del Niño es diferente porque se da en un clima de aislamiento por la pandemia de COVID-19 y por ello, la labor de madres, padres y cuidadores es esencial para los pequeños, señaló el Maestro Raúl Martín del Campo Sánchez, director adjunto del Instituto Nacional de Psiquiatría y aliado de la Coalición México Salud-Hable.
Del Campo recomienda fomentar la escucha activa y una actitud comprensiva de las mamás y los papás hacia sus hijas e hijos, así como diseñar y supervisar actividades escolares y recreativas.
Los menores de edad pueden responder a una situación difícil y desestabilizadora como la que vivimos, aferrándose a sus mayores, angustiándose, aislándose, enojándose, o bien experimentando cambios de humor, pesadillas, insomnio o incontinencia nocturna, dijo.
El especialista expresó que, por lo general, niñas y niños se sienten aliviados cuando expresan y comunican sus sentimientos e inquietudes en un entorno seguro y comprensivo; a veces, dedicarse a actividades creativas, como jugar y dibujar puede facilitar este proceso.
Gracias al dibujo, los niños se expresan dentro de un mundo que ellos mismos crean con la ayuda de su imaginación. Es a través de sus ilustraciones donde se transmiten más fácilmente sus sentimientos y plasman la forma en la que perciben su entorno.
Una forma para que los pequeños aprendan más fácilmente a iluminar correctamente es invitarlos primeramente a hacer ejercicios de líneas verticales, horizontales y diagonales. El adulto puede apoyar guiando su mano para trazar las primeras veces.
El siguiente paso es dibujar figuras geométricas o frutas de un tamaño pequeño e invitar a los pequeños a iluminarlas con líneas una seguida de la otra, con el fin de aprender esta técnica sin aburrirse. Pueden usar colores de madera o plumones, los cuales le darán más brillantez a sus imágenes.
Los chicos necesitan el amor de los adultos y, con frecuencia, mayor atención durante tiempos difíciles, como el presente. Es fundamental que para interactuar con ellas y ellos, los adultos manejen bien sus propias emociones y permanezcan en calma, escuchen las preocupaciones de los infantes, les hablen con amabilidad y los tranquilicen.
Añadió que muchos expertos reiteran la importancia de mantener las rutinas y cronogramas habituales en la mayor medida posible o ayuden a crear nuevas rutinas en un nuevo entorno, que incluyan aprendizaje, juego y relajación.
No se debe evadir el hablar de la contingencia por el COVID-19 con ellas y ellos. Sí se recomienda al tocar el tema, darles datos simples sobre lo que está ocurriendo e información clara y adecuada para su edad sobre cómo reducir el riesgo de infección y mantenerse seguros, en un lenguaje que ellos entiendan, apuntó.
Al efecto, ya se han desarrollado videos para niñas y niños de diferentes edades, muy amenos e ilustrativos, que están al alcance en las redes sociales, indico el Mtro. Martín del Campo.