Datos como que en casi 90% de los casos de cáncer de cuello uterino en el mundo se presenten en países de ingresos bajos y medios, y que las tasas de mortalidad por esta patología sean tres veces más altas en América Latina y el Caribe que en Norteamérica; que en tres de cada cuatro casos, la investigación en enfermedades que afectan específicamente a las mujeres esté insuficientemente financiada o que las mujeres sean más propensas a que el personal médico les indique que su dolor es emocional revelan la disparidad en el acceso a la salud, en cada etapa de la ruta de atención de las mujeres (prevención, diagnóstico, tratamiento).
En el Roche Press Day 2022, expertos conversaron sobre esta problemática para identificar posibles soluciones y abordar los avances en esta materia. Al respecto, Sue Horton, profesora de la Universidad de Waterloo, abrió el diálogo advirtiendo que la mayor brecha en la ruta de atención está en el diagnóstico, sobre todo en países de ingresos bajos y medios. Asimismo indicó que -específicamente en América Latina- algunos de los factores que lideran la inequidad en el acceso a un diagnóstico oportuno se relacionan con la ubicación rural, la menor educación, y la baja cobertura en el aseguramiento en salud.
En el mismo escenario Lucely Cetina, responsable del Programa Modelo Integral de Atención al Cáncer de Cuello Uterino del Instituto Nacional de Cancerología de México, hizo un recuento de la lista de mayores dificultades que afrontan las mujeres: “Su diagnóstico y tratamiento está condicionado por sus condiciones sociales, la falta de acceso a vacunas y pruebas moleculares, la dificultad a acceder a soluciones integrales oncológicas, que sean individualizadas y de vanguardia en todas las etapas clínicas, entre otros”, afirmó y agregó que es inconcebible que cáncer como el de cuello uterino siga cobrando la vida de las mujeres en América Latina, cuando esta enfermedad ya se ha superado en países desarrollados.
Al respecto, Marieli Alfonzo, gerente general de Roche Colombia, señaló que, si las mujeres están saludables y son adecuadamente diagnosticadas y tratadas, podrán vivir más momentos de calidad con sus familias, seguir desarrollándose profesionalmente, hacer realidad su sueño de ser mamá -si así lo desean- y seguir aportando a la sociedad.
Innovación: la clave para mejorar la atención
Julio César Teixeira, coordinador del Programa de Tamizaje de Cáncer Cervicouterino de la Universidad de Campinas, destacó el rol de la tecnología en este propósito. Al respecto, propuso la creación los sistemas de registro virtual para la población “a los que se pueda acceder para controlar la realización de pruebas, resultados y, sobre todo, señalar a las mujeres que están desactualizadas o atrasadas con sus pruebas o tratamientos preventivos”. Teixeira agregó que “este sistema permitiría integrar la información e identificar quién está fuera del sistema, brindar diagnósticos oportunos para detectar lesiones precancerosas o cáncer anticipado y tener mayores tasas de curación a menor costo”.
Si bien las tecnologías disponibles permitirán optimizar recursos y tiempos de atención, como señaló Fernanda Rivera, enfermera y líder de Salud de la Mujer en Roche Chile, es importante revisar otras barreras que limitan el acceso a la salud integral a las mujeres, “como las socio-culturales, el rol de los esposos (hombres) y la labor de la mujer como “dueñas de casa” que no les da tiempo para dedicarse a su salud”, indicó.
En el caso colombiano, la gerente de Roche en el país, Marieli Alfonzo, compartió el caso de éxito de Consultorios Rosados, una iniciativa en la que se integraron diferentes actores privados locales para beneficiar a más de 14.000 mujeres de distintas ciudades del país que, de manera preventiva y gratuita, pueden hacerse el chequeo periódico de cáncer de mama. “Este proyecto es un ejemplo de lo que podemos lograr cuando nos articulamos los diferentes actores que participamos en la ruta de atención de los pacientes en el sistema de salud”, manifestó.
Finalmente, María Fernanda Navarro, directora Regional para Latinoamérica del City Cancer Challenge (C/Can), destacó que otro ejemplo de esa articulación necesaria en iniciativas para mejorar la atención en salud de las mujeres es la desarrollada por C/Can y la Sociedad Americana de Oncología Clínica (ASCO) con el Programa de Liderazgo para Mujeres en Oncología, con el que se abordan los obstáculos específicos a los que se enfrentan las mujeres líderes en oncología y pretende reforzar las habilidades de liderazgo de las mujeres que trabajan en dicha área para mejorar el acceso a una atención oncológica equitativa.