Hace 5 años, la FDA anunció un hecho histórico: la aprobación de la primera terapia genética en Estados Unidos para el tratamiento de la leucemia linfoblástica aguda en ciertos pacientes pediátricos y adultos jóvenes. Esta aprobación marcó un parteaguas en el desarrollo de la medicina personalizada para el tratamiento del cáncer y otras enfermedades graves y potencialmente mortales.
Este hecho cambió el panorama del cáncer, ya que al personalizar las terapias se han generado mejores resultados en los pacientes porque el uso de estas nuevas herramientas está basado en la información genética que da el mismo paciente o el tumor al que se enfrenta.
En ese sentido, la comunicación se convirtió también en un factor crítico para acelerar el conocimiento de estas y sobre todo impulsar una mayor implementación de terapias innovadoras personalizadas en los sistemas de gobierno.
Aun con esta aceleración desde el ámbito del marketing y la comunicación en la industria farmacéutica mexicana, se vislumbra una oportunidad sin precedentes para tener un mayor impulso al forjar alianzas que trasciendan las barreras y transformen la narrativa que rodea a este padecimiento.
El informe “La medicina personalizada para el tratamiento del cáncer: Tan cerca y tan lejos”, realizado por el equipo de Healthcare de LLYC, resalta la urgente necesidad de establecer colaboraciones sólidas entre autoridades, organizaciones y empresas para agilizar la adopción de medicamentos vanguardistas en el tratamiento del cáncer.
Si bien la investigación y el desarrollo de terapias innovadoras están en su apogeo, existe una brecha significativa entre estos avances y su disponibilidad para los pacientes que los necesitan.
Basándose en las lecciones aprendidas de estrategias de marketing en México, Luis Anaya, director senior de Healthcare Región Norte en LLYC, comparte cinco consejos esenciales para las compañías farmacéuticas que buscan desempeñar un papel transformador en la lucha contra el cáncer:
- Humanizar la Ciencia:
La ciencia detrás de los tratamientos puede ser compleja, pero la comunicación exitosa implica convertir esa complejidad en un mensaje accesible y humano. Es esencial traducir el lenguaje científico en términos comprensibles para los pacientes y sus familias. Utilizar historias de pacientes reales que hayan experimentado mejoras significativas gracias a los tratamientos puede humanizar la experiencia y brindar un sentido de esperanza y conexión emocional.
- Personalizar la Educación y Empoderamiento:
El conocimiento es poder, y en la lucha contra el cáncer, el acceso a información precisa y actualizada es crucial. Las compañías farmacéuticas pueden desempeñar un papel activo al proporcionar recursos educativos claros y confiables, basados en un mayor conocimiento de las necesidades de los pacientes. Crear plataformas en línea con información verificada sobre diferentes tipos de cáncer, opciones de tratamiento y medidas preventivas puede empoderar a los pacientes y sus seres queridos para tomar decisiones informadas sobre su salud.
- Transparencia y Responsabilidad:
La confianza es un activo invaluable en la industria farmacéutica. Las compañías deben mantener un alto nivel de transparencia en su comunicación, compartiendo información precisa sobre la efectividad, los efectos secundarios y la disponibilidad de tratamientos. Esto contribuye a la construcción de relaciones sólidas y duraderas con médicos, pacientes y la comunidad en general.
- Colaboración y Alianzas Estratégicas:
La lucha contra el cáncer no es una batalla que se pueda librar en solitario. La colaboración entre diferentes actores, incluidas las compañías farmacéuticas, los médicos, las organizaciones sin fines de lucro y las autoridades de salud, es fundamental. Al establecer alianzas estratégicas, las compañías farmacéuticas pueden amplificar su impacto y llegar a un público más amplio. La comunicación efectiva entre estas partes interesadas garantiza que los recursos y la información fluyan de manera eficiente.
- Sensibilidad Cultural y Localización:
México es una nación diversa y multicultural, y la comunicación efectiva debe tener en cuenta estas diferencias. Las compañías farmacéuticas deben adaptar sus mensajes y estrategias a las sensibilidades culturales y lingüísticas de diferentes regiones de México. La localización de contenidos y campañas puede garantizar que los mensajes sean relevantes y resuenen con las diversas comunidades.
“La lucha contra el cáncer no es solo una batalla médica, es una batalla de esperanza y comprensión. Las compañías farmacéuticas tienen la oportunidad de ser líderes en esta lucha, utilizando la comunicación como su herramienta principal. Esta serie de consejos puede guiar a las compañías farmacéuticas hacia una comunicación efectiva que inspire, eduque y transforme la percepción y el enfoque hacia el cáncer”, concluyó Luis Anaya.