Nuestro cuerpo es un laboratorio andando. El metabolismo es la capacidad de cada organismo de transformar los alimentos en energía y otras sustancias necesarias para la vida.
Dicho proceso se divide en dos áreas: anabolismo, que es la formación de nuevas moléculas a través de otras más simples; y catabolismo, que es la destrucción de moléculas grandes a pequeñas, para que puedan ser utilizadas en el anabolismo.
A continuación, analizaremos algunos de los mitos más populares:
Mito: El metabolismo se vuelve más lento con la edad.
Realidad: La principal causa de que el metabolismo aminore con el paso de los años, es que la masa muscular va en decremento. Esto en relación a que, tanto la intensidad de las actividades que realizamos como la cantidad, suelen disminuir notablemente. La recomendación es continuar con un estilo de vida activo, tal como menciona la Organización Mundial de la Salud (OMS); realizar 150 minutos de actividad física moderada o 75 minutos de actividad física vigorosa por semana. De esta forma, mantendrás el tono muscular del organismo.
Mito: Para bajar de peso debo eliminar las grasas o los carbohidratos de mi dieta.
Realidad: Cuando uno quiere bajar de peso, el déficit calórico es el factor más importante. Esto quiere decir que debemos ingerir menos calorías de las que quemamos. La forma más saludable de adelgazar es a través de una dieta balanceada, la cual incluya carbohidratos, grasas y proteínas. Esta dieta debe formar un déficit de, aproximadamente, 500 calorías al día. Asimismo, no es necesario eliminar el 100% de algunos de los macronutrientes (lípidos, proteínas, hidratos de carbono), ya que se pueden generar descompensaciones. Lo mejor es recibir orientación nutrimental de un profesional para balancear nuestra alimentación y lograr la restricción calórica adecuada para cada uno de nosotros.
Mito: Si realizo un entrenamiento con pesas, desarrollaré un cuerpo muy musculoso.
Realidad: Un entrenamiento con pesas adecuado tiene muchos beneficios, entre ellos, el fortalecimiento de la masa muscular y el aumento de la densidad ósea. El resultado es un cuerpo más fuerte, más resistente y más tonificado. Cuando entrenamos con pesas, desarrollamos más músculo, lo que a su vez hace que nuestro metabolismo se acelere, puesto que el cuerpo necesita más calorías para mantenerse. Ahora bien, no olvidemos que la actividad física sólo es una parte importante de una vida activa y saludable, también debemos incluir una dieta balanceada.
Mito: Hacer ejercicio por la mañana y con el estómago vacío, me ayudará a quemar más grasa.
Realidad: Recordemos que, el último alimento de nuestro día, debería ser aproximadamente de 2 a 3 horas antes de dormir, y un sueño reparador se recomienda de 6 a 8 horas. Por lo tanto, al despertar tendríamos aproximadamente de 8 a 10 horas sin habernos alimentado; esto es ya un ayuno prolongado, pero si además me dispongo a realizar actividad física a primera hora y sin haber probado ningún alimento, expongo a mi cuerpo a padecer hipoglucemias (poca glucosa en la sangre) con síntomas como hambre, temblor, mareos y debilidad. Recordemos que la glucosa es la fuente primordial de energía en nuestro cuerpo. Es por esto que, es importante ingerir por lo menos de 100 a 200 calorías, en forma de carbohidratos y 30 minutos antes de empezar el ejercicio para tener un mejor rendimiento y quemar más calorías.
Mito: Debo realizar 5 comidas al día.
Realidad: Como recomendación general, uno debe realizar comidas pequeñas y frecuentes y con una diferencia de 4 horas aproximadamente entre alimentos. Ahora bien, los tiempos de alimentación que se recomiendan son: desayuno, almuerzo, comida, merienda y cena. Algunas personas realizan una colación nocturna, cumpliendo hasta con 6 tiempos de comida. El objetivo de mantener “comidas pequeñas y frecuentes” es que no padezcamos apetito entre comidas, debido a que si esto ocurre, el tiempo de alimento más próximo será abundante, provocando que se ingieran más calorías de las que necesitamos. Recordemos que, cuando esto ocurre, nuestro cuerpo almacena exceso de calorías como tejido adiposo.
Mito: Saltarme las comidas hará que pierda peso.
Realidad: Nuestro organismo puede adaptarse fácilmente a hábitos correctos o incorrectos, teniendo en cuenta que los incorrectos nos llevarán más rápido a procesos de salud-enfermedad. Es importante no pasar más de 4 horas sin consumir alimentos. Los ayunos provocan que nuestro organismo adopte un “modo” de ahorro de energía, es decir que nuestro metabolismo se vuelve lento, con la finalidad de soportar los tiempos de ayuno con un mínimo de ingesta.