El regreso a clases representa una de las fechas más altas en cuanto a consumo y gastos en las familias, supera el día del amor y la amistad, día de las madres o las vacaciones de semana santa, este año según datos de Cámaras Nacionales de Comercio, Servicios y Turismo (Concanaco-Servytur), la compra de útiles escolares incrementará en 4%.
Aunque para los comercios representa una importante reactivación económica y para diferentes instituciones financieras la oportunidad de lanzar promociones así como estrategias de marketing estacional, para muchos de los padres de familia significa un desequilibrio importante en sus finanzas, viéndose orillados a utilizar tarjetas de crédito, vender pertenencias o conseguir un préstamo, del que les puede tomar en promedio entre 4 y 8 meses recuperarse, por eso es importante involucrar a los niños y jóvenes en todo el proceso ensañándoles estrategias que aminoren los gastos como:
Para ello, Skandia aconseja:
- Tener un presupuesto y adherirse a él lo más posible.
- Evaluar qué materiales se pueden re-utilizar.
- Involúcralos en las compras, a fin de que dimensionen cuántas cosas son necesarias, lo importante de comparar precios y lo que representa.
- No comprar cosas caras o innecesarias por capricho. Poner ejemplos sencillos del valor o hacer negociaciones puede ser una estrategia útil, como: “esta mochila es muy cara, equivale a lo que recibes como gasto para el recreo de 7 semanas. Si la compramos, no recibirás dinero durante ese periodo.”
- Una vez que se adquieran todos los útiles, revisen juntos los materiales adquiridos y tengan una plática sobre la importancia que representan y, que de perderlos habrá que incurrir nuevamente en gastos.
- Cada vez que pierda algo, retira por algunos días su asignación de la semana para comprarlo. Los niños necesitan saber, que aunque los materiales sean o no de bajo precio, hay que cuidarlos y utilizarlos bien.
- Si antes no han hecho dinámicas similares, sé paciente. Aprender a cuidar las cosas, así como ahorrar, es un hábito que se construye con la práctica.
- Aprovechar los descuentos y las ferias o expos
Se trata de involucrar a los niños para que sean conscientes de lo que cuestan las cosas y animarlos a ahorrar mensualmente de manera constante y en pequeñas cantidades, para que a la larga sean adultos responsables con una sana cultura financiera y sepan invertir y planificar su futuro económico.
Rodrigo Iñiguez, director comercial de agentes independientes de Skandia México, dijo que es conveniente planificar y poner en práctica acciones que involucren a todos los miembros de la familia, más aún, si no se ahorró con antelación, para evitar que los gastos de regreso a clases impacten negativamente las finanzas familiares. También hay planes de ahorro e inversión flexibles, con productos que se adaptan a cada familia para proyectar la educación de los hijos desde preescolar hasta universidad. Estar preparado es crucial para cada regreso a clases.
Una buena opción para surtir la lista de útiles escolares con un ahorro de hasta el 50% en el gasto total es Expo Regreso a Clases en el Palacio de los Deportes, ahí encontraras más de 250 expositores con los mejores precios en artículos de papelería, mochilas, libros, uniformes, calzado y tecnología, entre otros. Además puedes aprovechar para hacer una revisión oftalmológica, visitar al dentista y tener una consulta médica para obtener el certificado médico que piden las escuelas al iniciar el curso.
Estará abierta hasta el domingo 18 de agosto y la entrada es gratuita. En el corte de listón estuvieron presentes los empresarios: Gerar Leseigneur, Director General de Maped; Sergio Valdez, Director Comercial de Bio Papel Scribe; Alejandro González, Director Comercial de DIXON; Marco Antonio Gutiérrez, Director de Grupo Papelero Gutiérrez y José Rozanes, CEO de Expo Regreso a Clases 2019.
Es importante resaltar que al menos 30 artículos entre lápices, colores, bolígrafos, cuadernos, reglas, tijeras y libros integran la larga lista de útiles escolares, lo cual representa hasta el 70% del gasto mensual de las familias mexicanas, destinando un mínimo de $901 y hasta $2,586 por hijo, dependiendo del grado escolar y tipo de escuela.