En México, el problema dermatológico más común entre los adolescentes es el acné. Se calcula que el 70% de nuestra juventud sufre de esta afectación y es hasta los 25 años cuando esta desaparece, dejando solo algunas señales en aquellos casos de tipo de acné severo o en quienes no lo trataron adecuadamente.
Se estima que el 5% de los hombres adultos y el 12% de las mujeres continúan sufriendo de acné con el paso de los años, siendo los varones quienes más la padecen desde su adolescencia. El acné aparece cuando hay un exceso de sebo y demasiadas células muertas de piel, obstruyendo los poros y haciendo de la superficie el mejor lugar para que ciertas bacterias se reproduzcan a gran velocidad generando inflamación, dolor y en algunos casos pus.
Las imperfecciones más comunes son:
Punto blanco: Aparece cuando el poro se obstruye y sobresale de la piel.
Espinilla o punto negro: Si el poro se obstruye, pero permanece abierto, la superficie tiende se oscurece y da una apariencia de polvo incrustado en el rostro.
Granos rojos: Cuando la pared del poro se abre y deja que el sebo con las bacterias y las células de piel muerta hagan su hogar en él, se producen los denominados granos rojos, denominados así porque muchas veces alrededor aparece este color y la punta es blanca como reacción del cuerpo a la infección.
Nódulos: En algunas ocasiones, los poros se abren en niveles muy profundos de la piel, dando lugar a bultos infectados, quistes o nódulos. Estos suelen ser muy dolorosos. Se dan en los casos graves de acné.
¿Cómo evitar que me queden marcas en la piel?
Nunca pellizques tu piel.
Sabemos que puede resultar tentador pellizcar las imperfecciones con la intención de que no se vean o que se quite lo abultado de cada una de ellas; sin embargo, lamentamos decirte que el tocarte constantemente el rostro, solamente hará que este se enrojezca mucho más, se infecte más rápido e incluso que te causes daños irreversibles generando los famosos “cráteres”, cicatrices provocadas por la mala sanación de una imperfección.
Lo que sí debes hacer, es limpiar la superficie de la piel dos veces al día con productos especiales para pieles grasas que te hidraten y sean astringentes. De este modo ayudaremos retirando el exceso de grasa en la zona y de células muertas. Una vez que lavaste tu rostro adecuadamente, seca con pequeños golpecitos para evitar el maltratar tu rostro.
Tratamientos tópicos
Cuando las imperfecciones comienzan a ser más constantes o a ser dolorosos, es momento de acudir a un dermatólogo de confianza y comenzar algún tipo de tratamiento tópico como la crioterapia facial.
Ésta última también se conoce como criofacial que consiste en la aplicación de un frío intenso de hasta -80Cº en el rostro y cuello por aproximadamente ocho minutos. Este tratamiento no invasivo está disponible en Cryomx y ha revolucionado el mundo de los faciales, ya que gracias al gas de nitrógeno líquido y la exposición al frío que le damos al rostro, se produce una activación inmediata de la circulación en la zona y los fibroblastos comienzan a trabajar de una forma intensa produciendo colágeno; y no solo eso, para casos de acné su eficacia radica en que trabaja con las causas directas de la afección: consigue matar las bacterias que provocan la infección y las glándulas sebáceas regulan su producción de grasa.
No compartas productos personales y toma al menos 2 litros de agua al día.
No importa si es tu mamá, tu pareja, tu persona favorita en la vida, nunca, pero nunca, compartas nada personal (toallas faciales, maquillaje, esponjas, jabones), ya que de esta manera se facilita el contagio de bacterias favorecedoras para afecciones en la piel.
Lo que sí debes hacer, es consumir dos litros de agua al día. Al ingerir las cantidades recomendables de agua el cuerpo contará con mayores recursos para la eliminación de toxinas.
Y si requieres de atención consulta con especialistas.