Tania es una joven dedicada a la organización de eventos que en 2019 aceptó realizar una donación de médula ósea para intentar salvar la vida de una persona compatible genéticamente con ella, a través de un trasplante de células madre (también conocido como de médula ósea). Pero tenía dudas y temores a raíz de mitos que había escuchado sobre el procedimiento, por ello, consultamos con Be The Match para que nos disipara algunas de ellas.
Algunas preguntas tienen que ver, por ejemplo con la idea de que todas las donaciones implican cirugía, qué tipo de procedimientos se utilizan, si es posible realizar más de una donación, si las personas con tatuajes pueden participar, si en el proceso se llega a tocar la médula espinal o si se hará buen uso de los datos de los donadores
La principal confusión: médula ósea vs. médula espinal
Debido a la similitud de los nombres y a la desinformación imperante en redes sociales y charlas comunes, existen mitos y dudas en torno a la médula ósea, confundiéndose constantemente con la médula espinal a pesar de que sus funciones son muy distintas.
En el primer caso, se trata de un tejido esponjoso en el interior de algunos huesos que aloja las células madre, encargadas de formar la sangre; en el otro extremo, hablamos de la médula exclusiva de la columna vertebral que transmite los impulsos nerviosos desde el cerebro hacia el resto del cuerpo y viceversa.
Información vs. Fake news
Además de esa confusión entre los tipos de médula, existen otros mitos que son necesarios derribar para combatir la desinformación e incluso posibles fake news en la red; por ello, Be The Match nos explica lo que hay que saber sobre el trasplante de células madre y cómo los posibles donadores pueden “regalar vida en vida”:
Mito: Todas las donaciones requieren cirugía.
Realidad: Falso. Aunque el 23% de las donaciones sí llegan a necesitar una intervención sencilla en el hueso pélvico como en el caso de Tania, tras la cual los donadores generalmente regresan a casa el mismo día y sólo sienten una molestia ligera en la espalda baja, la gran mayoría (77%) de estos “regalos de vida” se hacen mediante extracción de sangre periférica, que es un proceso similar a cualquier obtención de plaquetas pero más especializado que no necesita hospitalización.
Mito: Solo puedo ser donador una vez.
Realidad: Si bien las probabilidades de ser compatible genéticamente con algún paciente son bajas, en promedio 1 de cada 430 personas, es totalmente posible donar varias veces en tu vida.
Es importante señalar que nunca se pone en riesgo la salud del donador. Algunos podrían sentir una leve descompensación nada peligrosa, ya que las células madre donadas no representan ni el 10% de las que posee una persona, y se empiezan a regenerar inmediatamente después de haber sido extraídas, por lo que si un donador tuviera que donar a un familiar, luego de haberlo hecho por un paciente no emparentado o viceversa, no habría ningún inconveniente.
Mito: Donar médula ósea involucra extraer trozos de hueso de la columna vertebral.
Realidad: ¡Para nada! Lo que se dona son células madre, las cuales son células jóvenes que cuando empiezan a madurar pueden formar glóbulos blancos, glóbulos rojos, plaquetas, entre otras células sanguíneas, dependiendo de lo que el cuerpo necesite.
Para salvarle la vida a un paciente solamente se necesita la médula ósea líquida que está dentro del hueso pélvico, pero nunca el hueso como tal.
Mito: Las personas tatuadas, con piercings o homosexuales no pueden donar.
Realidad: Quienes tienen tatuajes o perforaciones sí pueden facilitar sus células madre a quienes más las necesitan, siempre y cuando haya pasado al menos un año desde su última modificación, es el mismo requisito que en una donación de sangre tradicional. Es importante señalar que si bien existe ese tiempo de espera para la donación como tal, sí pueden unirse al registro de posibles donadores en el momento que elijan.
Por otro lado, la preferencia sexual no tiene nada que ver con la imposibilidad de donar células madre: cualquier ser humano sano de entre 18 y 44 años puede registrarse para regalar vida en vida.
Mito: Si me convierto en donador, todos lo sabrán.
Realidad: ¡Falso! Be The Match opera bajo el marco de la ley en todos los países garantizando que ninguna persona puede tener acceso a los datos personales. En caso de resultar compatible con un paciente, todos los procesos de enlace se hacen a través de la organización. Así que no tienes de qué preocuparte pues toda tu información está segura.
Es importante destacar que si tanto el donador como el paciente receptor lo deciden, luego de un año y medio después de haber realizado el trasplante, pueden llegar a conocerse. Como ves, la donación de células madre y todos los procesos que conlleva es mucho más sencilla de lo que parece.
Fotos: Cortesía.