La biofarmacéutica Takeda anunció un acuerdo mutuo con IDT Biologika GmbH (“IDT”), organización de desarrollo y fabricación por contrato, para utilizar la capacidad previamente reservada en IDT para la vacuna candidata contra el dengue de Takeda (TAK-003).
Esta capacidad será destinada para fabricar la vacuna de una sola dosis contra la COVID-19 desarrollada por Janssen, de Johnson & Johnson. Al término de un periodo de tres meses, la biofarmacéutica japonesa recuperará dicha capacidad para reanudar la fabricación de su vacuna contra el dengue que tiene previsto lanzar al mercado, sujeto a aprobaciones regulatorias.
“Durante los últimos meses, se ha hecho evidente que los desafíos impuestos por la pandemia sólo pueden ser resueltos con cooperación y compromiso. Creo que este acuerdo a corto plazo entre tres organizaciones de la industria demuestra la voluntad y capacidad del sector de contribuir en la resolución de esta crisis de manera creativa. Con nuestra producción para Janssen y AstraZeneca más el desarrollo de nuestra propia vacuna contra la COVID-19 en cooperación con el Centro Alemán para la Investigación de Infecciones, nuestra compañía puede hacer una gran contribución a la lucha contra el COVID-19”, expresó Jürgen Betzing, CEO de IDT Biologika.
Con este acuerdo, Takeda actualmente apoya el acceso global a tres vacunas diferentes contra el COVID-19. La compañía ya había anunciado su compromiso con la provisión de un acceso rápido y sostenido a las vacunas contra la COVID-19 en Japón mediante asociaciones con Novavax y Moderna. Además, recibirá una transferencia de tecnología de fabricación de parte de Novavax y será responsable del desarrollo y comercialización con una capacidad de fabricación de más de 250 millones de dosis.
La compañía también importará y distribuirá 50 millones de dosis de la vacuna mRNA contra la COVID-19 de Moderna como parte de una asociación conjunta con Moderna y el Ministerio de Salud, Trabajo y Bienestar (MHLW, por sus siglas en inglés) de Japón.
Fotos: Pixabay