Recibir un diagnóstico de diabetes tipo 1 es algo que cambia la vida, sobre todo por el desconocimiento de las implicaciones que conlleva esta condición. Es común preguntarse si la diabetes tipo 1, que en la mayoría de los casos ocurre en la infancia y la adolescencia, pudiera ser causa de una vida con limitaciones, las cuales representan un verdadero reto y generan impacto dentro de todo el núcleo familiar.
La Dra. Raquel Faradji, endocrinóloga, internista, directora del Registro Nacional de Pacientes con Diabetes tipo 1 (RENACED) y directora de la Clínica EnDi, dio a conocer el panorama actual de la Diabetes tipo 1 en México.
“La diabetes tipo 1 es enfermedad autoinmune, crónica y no prevenible. Sin tratamiento con insulina puede ser mortal. Un buen control metabólico, es decir, con niveles de hemoglobina glucosilada (HbA1c) menores a 7% a través del tratamiento completo, previene en un 60% las complicaciones crónicas”, informó la especialista.
La Dra. Faradji añadió que la meta es lograr el tratamiento completo para todos los pacientes que viven con diabetes tipo 1, que en México suman 26,578 en la población de 0 a 19 años, de acuerdo con el Atlas de la Federación Internacional de Diabetes 2019.
“Para tener un buen control de la glucosa es necesaria la atención médica y la educación. El auto-monitoreo de mínimo 4 veces al día es clave para tener un buen control de la glucosa. Buscamos un tratamiento completo para todos los pacientes que viven con diabetes tipo 1”.
“En México se tiene poca información respecto a la prevalencia, prácticas de tratamiento de la diabetes tipo 1 y seguimiento de los pacientes. Por este motivo, médicos, familias y pacientes se unieron para llevar a cabo el Registro Nacional de Pacientes con Diabetes Tipo 1 (RENACED), avalado por la Sociedad Mexicana de Nutrición y Endocrinología”, informó la especialista.
Para llevar a cabo este estudio, se tuvo acceso, bajo estrictos cánones éticos, a los registros de 965 pacientes en varias unidades médicas, lo que permitió obtener datos confiables sobre todo en el grado de prevalencia, control y complicaciones. “Se encontró que el monitoreo de 4 veces al día de glucosa se asocia con niveles de hemoglobina glucosilada menores a 7%. También se descubrió que la educación en diabetes tiene un impacto positivo sobre el control glucémico”, abundó la directora del RENACED.
El estudio concluye que un buen control metabólico, con un buen plan de alimentación, actividad física, educación en diabetes, análogos de insulina y monitoreo de glucosa, aumentan la calidad de vida y mejoran la sobrevida, reduciendo significativamente las complicaciones crónicas y, en consecuencia, los gastos en salud en el largo plazo.
“El acceso oportuno al tratamiento completo para las personas que viven con DT1 permitirá que tengan una vida productiva y sin complicaciones. Es necesario aumentar el presupuesto para que las personas que viven con DT1 tengan acceso a lo que necesitan”, puntualizó la Dra. Faradji.
La diabetes no se cura, pero se puede controlar y vivir bien con ella
En su exposición durante la conferencia de prensa “Diabetes tipo 1, retos y oportunidades”, el Dr. Carlos Antillón Ferreira, especialista en endocrinología pediátrica, destacó la importancia de la educación en diabetes para su control.
Explicó que “en la diabetes tipo 1, el páncreas pierde la capacidad de fabricar la hormona insulina porque el sistema inmunitario ataca y destruye a sus células beta, encargadas de producir esta hormona. Consecuentemente, la concentración de azúcar en la sangre es más alta de lo normal y puede generar daños en los vasos sanguíneos y en diferentes órganos como ojos y riñones en el largo plazo.”
La Dr. Antillón añadió que “si los padres observan en sus hijos signos y síntomas como aumento de la sed, orinar con frecuencia, hambre extrema, pérdida de peso, fatiga, irritabilidad o cambios de comportamiento, y aliento con olor a fruta, se trata de diabetes tipo 1 y deben acudir de inmediato con un especialista en endocrinología pediátrica para que proceda a la evaluación y el diagnóstico.”
El Dr. Antillón subrayó que el tratamiento adecuado y oportuno brinda grandes beneficios, como mantener la glucosa sanguínea en niveles normales, minimizar los síntomas y prevenir las complicaciones de la diabetes, como enfermedad cardiovascular, lesión en los nervios, daño renal y ocular, las cuales pueden manifestarse en la edad adulta cuando no hay un buen control de la diabetes en la infancia. Por este motivo, el objetivo de padres y niños debe ser mantener las concentraciones de azúcar en la sangre lo más cerca posible de lo normal.
“Para lograrlo, los niños con diabetes tipo 1 necesitan aprender a inyectarse insulina según le haya indicado su médico, seguir una dieta sana y equilibrada, prestando atención especial a la cantidad de hidratos de carbono de cada comida; medirse la concentración de azúcar periódicamente y hacer actividad física con regularidad. Se requiere del apoyo multidisciplinario del médico, el educador en diabetes, el nutriólogo y el preparador físico. De este modo, la diabetes nunca será un obstáculo para que los niños puedan hacer una vida normal y lograr los objetivos que se propongan”, indicó el Dr. Antillón Ferreira.
Apoyo emocional, fundamental para un niño con diabetes tipo 1
En su intervención, la Dra. Erika Backhoff, psicóloga y psicoterapeuta especializada en personas con diabetes, informó que existen múltiples variables psicológicas que ejercen un impacto diferente sobre las personas que viven con diabetes y sus familias, así como en su capacidad para manejarla.
“Otros factores también influyen en la respuesta y adaptación a la vida con diabetes, como la personalidad, la edad y el contexto. El contexto influye de manera decisiva, ya que los costos de la atención a la diabetes tipo 1 pueden rebasar el presupuesto familiar, lo que se une a la presión, temores, incertidumbre, depresión y ansiedad generados por la propia diabetes”, explicó la especialista en psicología y psicoterapia.
La Dra. Backhoff añadió que “la persona cansada o agotada por lo demandante del tratamiento y cuidados de su diabetes (burn out), puede llegar a ignorar la condición con la que vive y poner en peligro su salud. Esta es una de las principales barreras para el cuidado de la diabetes. Al hablar de diabetes, es importante considerar la salud mental, ya que el estigma social que la rodea levanta muros que impiden a los pacientes adaptarse a la vida con esta condición.”
Finalmente, respecto a los avances médicos para el control de la diabetes tipo 1, el Dr. Mike Vivas, Director Médico, Clínico, Regulatorio y de Calidad de Novo Nordisk México informó que en nuestro país están disponibles para médicos y pacientes medicamentos eficaces como la insulina degludec de uso pediátrico, cuya duración se prolonga hasta 48 horas.
“Esto no cambia la aplicación que debe ser cada 24 horas, sino que permite flexibilidad para que los pacientes puedan aplicársela en horarios diferentes. También evita la variabilidad en los niveles de azúcar durante el día y el riesgo de azúcar baja o hipoglucemia, que en su tipo severo puede causar serios daños a la salud,” indicó el Dr. Vivas.