El 25 de noviembre se conmemora el Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer y, si partimos de que, en forma general, la violencia se manifiesta de forma física, sexual y psicológica, resulta una constante que dentro de las relaciones de pareja existen conductas de coerción que comprenden: el control del comportamiento, el abuso verbal y el control económico, además de la agresión física.
De hecho, las lesiones no son las consecuencias de salud física más comunes del abuso de género; y en cambio, los problemas psicológicos son una realidad para un número significativo de mujeres que sufren este tipo de violencia, siendo ésta un producto del sistema político, económico, cultural y social en el que vivimos.
Ante esto, Shoshana Turkia, terapeuta cognitivo conductual, propone construir sistemas más armónicos y no permanecer en esta lógica de la cosificación de las personas, de las poblaciones vulneradas, proporcionando para ello, a través de la Transformación Radical, las herramientas necesarias para lograr ese cambio.
De la calidad de mis relaciones depende mi calidad de vida
De acuerdo con la especialista, las mujeres “deben dejar de ser solamente productoras y consumidoras para volverse ejecutoras de su deseo, de su sabiduría, de su poder y de su acción; y eso se logra al regresarle el poder a las ideas, a las cosas y a las relaciones que tenemos, porque se nos olvida que a lo largo de nuestra trayectoria, de nuestra vida, hemos reunido cosas que sirven para algo más que todo aquello que nos han enseñado, que hemos forjado ideas que nos dicen que no se puede por ser mujer, pero hay que ver cómo y con quién sí se puede, y para eso las relaciones son vitales, debemos generar redes afectivas para iniciar un verdadero cambio ya que, de la calidad de mis relaciones depende mi calidad de vida”.
La terapeuta Shoshana Turkia explica la forma en que, basada en las distintas disciplinas que ha estudiado a lo largo de su vida, puede llevar a cabo lo que ella llama la Transformación Radical en los pacientes; cambiando el sistema de toma de decisiones que tenemos desde cuatro perspectivas de nuestra autonomía: la económica, la emocional, la erótica y la espiritual.
“Hay que priorizar para poder regresar el poder a mí, utilizando los cuatro elementos muy poderosos: deseo, sabiduría, poder y acción, accediendo a nuestras fuentes de poder real, en lo material, en lo social, y para eso necesitamos de todas las personas que nos rodean para poder obtener los recursos necesarios”.
Recuperar el control de la vida
Las metas básicas para la sociedad en general deberán ser: el aumentar la seguridad de las mujeres; ayudarles a recuperar el control de sus vidas; y remediar el impacto psicológico del abuso, ante los síntomas de estrés postraumático, depresión, ansiedad y síntomas somáticos, aumentando su autoestima, y la confianza en sí mismas.
La terapia cognitivo-conductual enfocada en el trauma puede ser especialmente útil para reducir los problemas de salud mental asociados con la violencia, ya que busca reducir también la violencia hacia los agresores al considerar que éstos también podrían haber sido victimizados.
Las emociones son caminos de autoconocimiento
La también Maestra en Alta Dirección de Empresas (IPADE) afirma que a través de esta terapia se puede ayudar a encontrar los caminos de interpretación y autoconocimiento emocional que permitan tomar mejores decisiones, ya que “cuando entendemos que nuestras emociones son mensajeros que nos ayudan a alertarnos de lo que tenemos en nuestro entorno, entonces podemos recibir el mensaje, decodificarlo y utilizarlo a nuestro favor, logrando alinear la energía en movimiento con una congruencia que nos permita vivir en mayor armonía con nosotros mismos y con los demás”.
La terapia online y la interconsulta, dos excelentes opciones
Durante la atención de nuestra salud mental cada vez es más claro que necesitamos acompañarnos de personas con un abanico mucho más amplio, con herramientas que nos puedan ofrecer más y mejores alternativas. Desde el punto de vista de Shoshana Turkia, la terapia on line (en la cual también está certificada) y la interconsulta, se han convertido en las mejores opciones para lograr ese acompañamiento integral que la gente requiere en la actualidad: “Tras más de una década de búsqueda y preparación, ahora lo que he logrado es brindar al paciente el acompañamiento generando una comunicación afectiva, efectiva, respetuosa y amorosa, para que, entonces… quizá, pueda tomar la decisión adecuada”.
Fotos: Cortesía y Pixabay