El compromiso de Roche con el cáncer de mama ha sido patente desde hace más de 35 años cuando comprendimos el rol del oncogen HER2. Desde entonces las divisiones de Diagnóstica y Farmacéutica han investigado y desarrollado tanto pruebas de diagnóstico, como terapias innovadoras con el objetivo de transformar el abordaje del cáncer de mama, con la misión de proporcionar a las pacientes, especialistas y sistemas de salud, herramientas efectivas para afrontar este desafío médico que representa 29,929 nuevos casos en nuestro país anualmente. La clave para mejorar la supervivencia en el cáncer de mama radica en la oportunidad y precisión del diagnóstico y en el tratamiento oportuno.
La sospecha de cáncer de mama se manifiesta a través de diversos signos como cambios en la textura o forma del seno, la presencia de bultos, secreción del pezón, enrojecimiento o hinchazón, así como alteraciones en la piel de la mama. Aunque estos signos no confirman necesariamente el cáncer, son razones para buscar atención médica de inmediato.
“Sin embargo la detección temprana y la atención oportuna son esenciales en la lucha contra el cáncer de mama y pueden marcar la diferencia en el pronóstico y tratamiento de la enfermedad, esto puede representar una potencial mejora en las tasas de supervivencia y reducir su impacto. Sin embargo, el retraso en la búsqueda de atención médica es común, las mujeres llegan en etapas avanzadas y esto complica el abordaje”, recalcó la Dra. Roxanna Flores, gerente de acceso para Roche México.
“Nuestro portafolio de diagnóstico ofrece más de 25 pruebas personalizadas y confiables, como los biomarcadores que proporcionan observaciones objetivas de los perfiles tumorales para predecir su comportamiento y avanzar hacia una clasificación más precisa sobre el tipo de cáncer de mama. Estas pruebas, además, ayudan a comprender mejor los entornos microscópicos del tumor, seguimiento del tratamiento identificando posibles respuestas -positiva o negativa- al tratamiento (progresión a la enfermedad) y encontrando nuevas oportunidades para tratamientos terapéuticos”, precisó Alejandro Trujillo, director de Estrategia, Desarrollo de Negocio & Consultoría de Roche Diagnostics México.
Desde la división de Diagnóstica se proporcionan soluciones tecnológicas automatizadas para el diagnóstico preciso y oportuno del cáncer de mama. El panel de diagnóstico de cáncer de mama incluye marcadores para los receptores hormonales (de progesterona y estrógeno), Ki67 y HER2 que sirven al patólogo y al médico tratante para determinar si hay o no cáncer de mama y el subtipo. Si la evaluación de estos marcadores y particularmente de HER2, es indeterminada, es posible realizar una prueba confirmatoria llamada Dual Ish que evalúa con precisión el subtipo de gen HER2 positivo.
La precisión que se logra a través de estas soluciones diagnósticas permite tomar decisiones sobre el tipo de tratamiento que se necesita. Hoy en día la farmacéutica pone a disposición una amplia gama de pruebas diagnósticas diseñadas para permitir a los laboratorios de patología ofrecer resultados precisos y confiables.
En relación con el portafolio farmacéutico de Roche en cáncer de mama, en 2000, la farmacéutica acercó a las pacientes mexicanas el primer anticuerpo monoclonal aprobado (Trastuzumab) para el cáncer de mama dirigido a la sobreexpresión de un gen en particular: HER2. Años más tarde, en 2012, introdujimos Pertuzumab apostando para que dos tratamientos pudieran trabajar juntos, de manera complementaria, para tratar este subtipo agresivo de cáncer de mama de manera efectiva.
El avance de la tecnología ha permitido el desarrollo de innovadoras terapias, como la que recientemente aprobó Cofepris en México: PHESGO, primer terapia subcutánea que en un solo vial combina dos tratamientos (pertuzumab y trastuzumab) para el cáncer de mama HER2 positivo en etapas tempranas y metastásico que se administra entre 5 a 8 minutos, frente a las terapias intravenosas que requieren un proceso de más de 3 horas. Esta alternativa de tratamiento ofrece flexibilidad a las pacientes y a los sistemas de salud, al reducir las estadías hospitalarias y liberar recursos (humanos y de tiempo) para el cuidado de otros pacientes, beneficiando así a los sistemas de salud.
En un mundo donde el cáncer de mama sigue siendo una realidad abrumadora, Roche se mantiene firme en su compromiso de liderar la lucha contra esta enfermedad con la visión clara: la detección temprana y la innovación en el diagnóstico y tratamiento son esenciales para marcar la diferencia.