Bajar de peso, caminar más lento de lo normal o sentirse agotado cuando se llega a la cima de las escaleras, pueden ser algunos de los signos de alerta de la pérdida de masa muscular.
Cuando la pérdida muscular es avanzada se conoce también como sarcopenia, la cual afecta a uno de cada tres adultos mayores de 40 años. Muchas personas creen que es una cuestión relacionada con la vejez, pero no es así.
“Tenemos más de 600 músculos en el cuerpo, lo cual representa alrededor del 40% de nuestro peso, es decir casi la mitad de tu cuerpo”, explica la doctora. Mafalda Hurtado, directora Médica en Abbott. “Mientras que el envejecimiento es natural, la pérdida de masa muscular no lo es e impacta de manera directa en la movilidad, la fuerza y los niveles de energía, el sistema inmune e incluso en la función de los órganos”.
¿Cuáles son los riesgos de perder demasiada masa muscular? Si bien la pérdida muscular es común a partir de los 40 años, o al padecer alguna enfermedad crónica, también es una alerta de que tu salud podría estar en riesgo:
- Caídas: Las caídas y fracturas son una de las principales causas de lesiones y muerte entre adultos. En México, son el 30% de la causa de muerte en las personas mayores de 65 años.
- Movilidad: La pérdida de fuerza puede limitar la movilidad, resultando en una pérdida de nuestra independencia.
- Peso: La masa muscular es el mayor determinante individual de la tasa metabólica, o de cuántas calorías quemas por día.
- Salud cardíaca: Nuestro corazón es un músculo y la pérdida muscular puede impactar en nuestra salud cardiovascular.
- Resistencia a la insulina: Los músculos utilizan la glucosa en la sangre como combustible. La pérdida muscular puede aumentar el riesgo de resistencia a la insulina.
- Complicaciones hospitalarias: Los pacientes con un porcentaje de masa muscular baja son propensos a sufrir lesiones por presión, infecciones y a menudo no pueden completar tratamientos físicamente exigentes como la quimioterapia.
- Problemas respiratorios: Para las personas con complicaciones respiratorias, la pérdida de masa muscular puede llevar a mayores complicaciones.
- Esperanza de vida: Una mayor proporción entre músculo y grasa se relaciona con una mayor longevidad en adultos mayores.