El cáncer de próstata es la primera causa de muerte en hombres mayores de 65 años en México, y el 70% de los casos se detecta en etapas avanzadas, por lo que la atención a los primeros signos y síntomas de la enfermedad es vital.
En el marco del Día Mundial del cáncer de próstata, el Dr. Brian Miles, médico urólogo y vicepresidente del departamento de urología del Hospital Houston Methodist, explicó que actualmente hay muchos avances en cuanto a la detección y tratamiento de esta neoplasia maligna.
Con respecto a los signos y síntomas de la enfermedad, el especialista explicó que, “esencialmente no hay signos como dolor o sangrado, pero los más comunes son los asociados con el crecimiento de la próstata. Cuando los hombres envejecemos nuestra próstata crece, así que algunos tienen dificultades para orinar, pero esto no es síntoma de cáncer, no hay signos reales que se puedan observar. Es por eso que los hombres deben ir al médico a hacerse el examen de próstata”.
Agregó que un hombre “debe ir al doctor a revisar su próstata a partir de los 50 años. Sin embargo, si tiene historial familiar de cáncer de próstata, entonces desde los 40 años debe ir al médico a hacerse la prueba de antígeno prostático”.
Pese a que existe un alto porcentaje de pacientes que son detectados en etapa avanzada, el Dr. Miles explicó que, en etapas tempranas, “la probabilidad de cura es muy alta, si localizamos a tiempo el cáncer de próstata e incluso si está avanzado, hay muchas posibilidades de ser tratado con cirugía y radiación. Existen muchas opciones de tratamientos secundarios que pueden ayudar a los pacientes a vivir de 20 a 30 años, por ello yo lo llamo una enfermedad manejable.”
“Actualmente estamos estudiando casos en etapa avanzada. Existen protocolos que involucran quimioterapia y terapias hormonales en un intento de reducir la progresión del cáncer para que luego pueda tratarse con cirugía o radiación. También se están realizando algunos estudios interesantes con nueva tecnología que implica principalmente terapia focal, en donde sólo tratamos el área afectada y no toda la próstata”.
El especialista del Hospital Houston Methodist concluyó explicando que, “hay muchos tipos de cánceres incurables, pero en el caso de la neoplasia de próstata, si el paciente no se puede curar, hay muchas maneras de mantener su calidad de vida durante un largo tiempo”.