La Enfermedad por Reflujo Gastroesofágico (ERGE) es una de las causas más comunes de consulta al médico general y representa el principal motivo de consulta al gastroenterólogo; los pacientes que la padecen requieren de un medicamento denominado inhibidor de la bomba de protones (IBP), el cual funciona reduciendo la cantidad de ácido que produce el estómago.
En México, se calcula que el 40% de los adultos tiene regurgitación (conocidas comúnmente como agruras) al menos una vez al mes, el 20% una vez a la semana y 7% diariamente. La mayoría de estos pacientes consume en algún momento medicamentos que inhiben la secreción gástrica de ácido.
El Dr. Luis Federico Uscanga Domínguez, expresidente de la Asociación Mexicana de Gastroenterología, resaltó que, “la ERGE es un problema serio, ya que la persistencia de los síntomas afecta frecuentemente el desempeño de las actividades laborales y sociales de quienes la padecen. Los pacientes que sufren ERGE se quejan de pirosis (sensación de quemadura), debido a que el contenido del estómago se devuelve hacia el esófago, lo que ocasiona irritación del tubo digestivo y otros síntomas”.
La ERGE puede desarrollarse y convertirse en un riesgo para la salud, particularmente en aquellos pacientes que sufren de Esófago de Barrett, el cual puede evolucionar a cáncer de esófago o hay quienes desarrollan cicatrices obstructivas (estenosis esofágica) que ocasionan desnutrición.
La presencia de síntomas típicos 2 o más veces por semana, aunado a contar con los factores de riesgo como: herencia, sobrepeso, obesidad central, tabaquismo, alcohol y embarazo, pueden establecer el diagnóstico de ERGE.
Y en lo que respecta a la calidad de vida, las personas con reflujo severo pueden tener manifestaciones extresofágicas que verán afectada su calidad de vida como broncoespasmo, dolor precordial, afección en el patrón de sueño, así como modificaciones radicales en su estilo de alimentación.
Por su parte, el Dr. Raúl Bernal, expresidente de la Asociación Mexicana de Gastroenterología, destacó que “en las últimas dos décadas ha habido importantes avances diagnósticos y terapéuticos que han permitido un mayor conocimiento de la fisiopatología de la ERGE. Uno de estos avances es el esomeprazol, el cual es el único IBP que cuenta con 10 indicaciones aprobadas y está disponible en presentación oral, intravenosa y sobres granulados, lo que permite que pueda ser suministrado tanto a adultos como a niños.
El Dr. Bernal añadió que “el tratamiento de la ERGE debe individualizarse y orientarse a la presentación clínica de la enfermedad y a la intensidad de los síntomas. Los IBP son la primera opción recomendada de tratamiento inicial para la ERGE; sin embargo, es importante que el paciente acuda a su médico y no se automedique, pues de no tratarse adecuadamente, podría requerir cirugía”.
El Dr. Alberto Hegewisch, Director Médico AstraZeneca México, destacó que “como parte del compromiso con los pacientes, hoy contamos con un programa llamado MAZSalud, el cual tiene como objetivo brindar a los pacientes inscritos herramientas informativas, de educación y sensibilización sobre su padecimiento.